Por / Manuel Ant. Vega
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Hato Mayor.- La venta o arrendamiento irregular de terrenos del Consejo Estatal del Azúcar (CEA) a inversionistas nacionales y extranjeros, provocó ayer domingo un enfrentamiento entre miembros de la seguridad de los grupos Azucarera Porvenir, propiedad de inversionistas españoles y de la Constructora Castelar de inversiones guatemalteca, dejando como saldo a dos personas muertas y dos heridas a tiros y machetes en la comunidad de Malta de Palma, a unos 17 kilómetros al oeste de El Seibo.
Los inversionistas de la Azucarera Porvenir de accionistas españoles y la Constructora Castelar del grupo Campollo-Vicini, se disputan el control de unas 105 mil tareas, que a juicio de ambos el CEA le hizo una mala jugada y ahora no sabe cómo subsanar el conflicto.
Las víctimas fueron identificadas como Orlando de los Santos Santana, 31 años, residente en la comunidad cañera de Cañada del Agua y Alexis Cayetano (Kiko), 45 años, residente en el batey Haití Mejía, ambas comunidades perteneciente a la sección Mata de Palma de El Seibo.
En tanto que los heridos fueron identificados como el ex sargento policial Orlando Ramírez, quien recibió cuatro balazos, dos de ellos en el pecho y uno solo conocido como Felipe el Gago, quienes fueron llevado en estado grave al hospital regional Antonio Musa de San Pedro de Macorís.
El hecho ocurrió pasado las 2:40 de la tarde de este domingo, en Mata de Palma, cuando el sargento Orlando de los Santos, seguridad del grupo Castelar trató de impedir que obreros de la Azucarera Porvenir roturaran tierra y sembraran cañas en terrenos, que el CEA supuestamente habían vendido dos veces a ambos grupos.
Testigos oculares del hecho de sangre y que pidieron reserva de sus nombres, narraron a Atacando.net que entre miembros de la seguridad del grupo Castelar o Campollo Vicini se encontraron en un camino con la seguridad de la Azucarera Porvenir y que discutieron y que de inmediato el sargento que comanda la seguridad de Campollo-Vicini se vio acorralado y atacado a machetazos, lo que obligó al policía utilizar su arma de reglamento para defenderse.
Dijeron que el sargento al verse acorralado sacó su pistola y la emprendió a tiros contra Alexis Cayetano (Kiko), quien a pesar de que vio armado al policía le fue encima con un machete, viéndose obligado a disparar, matándolo de cinco disparos.
Indicaron que tras matar a Kiko, el sargento trató de huir en una motocicleta, pero que empleados agrícolas y miembros de la seguridad agrícola de la Azucarera Porvenir, le habrían atravesado un tractor en el camino, derribándolo de una motocicleta y luego trataron de picar a machetes.
Los testigos dijeron que el sargento logró hacer varios disparos más con su pistola, con los cuales hirió de gravedad al tractorista Orlando Ramírez y Felipe (El Gago). “Cuando el hirió al tractorista y a Felipe, entonces el sargento fue seguido, pero este sacó una escopeta y comenzó a disparar a la multitud que lo seguió, pero al agotárseles los cartuchos, fue alcanzado y prácticamente picado a machetazos y puñaladas, le partieron la escopeta en el cuerpo y le llevaron el arma”, contó un testigo, que dijo vio la horrible escena.
Tras ser picado por la multitud, el sargento quedó con su rostro totalmente irreconocible y heridas por diversas parte de su cuerpo.
En el levantamiento del cadáver participaron los fiscales Henry Estévez, y Jaime Mota, el coronel Luna Khounhad, así como la legista y miembros del Departamento de Investigaciones criminales de la Policía Nacional de El Seibo.
Los cadáveres quedaron a unos 150 metros de distancia uno del otro, pero al lado del cadáver del sargento Orlando de los Santos, fueron observado casquillo de pistola y escopeta, así como parte de piezas de la escopeta, que tras matarlo a machetazos y puñaladas, lo dejaron al lado del cuerpo, que quedó boca abajo en el camino real.
El cuerpo sin vida de Alexis Cayetano (Kiko), a quien se le tenía como un bravucón y que supuestamente había sido llevado a la zona por ser un hombre guapo y de ser fuerza de choque en conflicto de esa índole.
Al frente de las investigaciones se puso el coronel Luna Khounhard, quien dijo que para fines de investigaciones se detuvieron a unas 12 personas de Mata de Palma, que estaban cercano a la tragedia.
El jefe policial, explicó que la tragedia se generó tras un conflicto por el control de unos terrenos, que alegadamente el CEA le habría vendido a los dos grupos económicos, que se han visto obligado a colocar seguridad en los campos agrícolas.
Los cuerpos sin vidas fueron llevados a Patología Forenses en San Pedro de Macorís, para fines de necropsia.
EL CONFLICTO
José Guzmán, presidente de la Comisión de los Derechos Humanos, quien se presentó al lugar de la tragedia, consideró el hecho de sangre como “Crónica de una muerte anunciada”, debido a que la situación se presentó porque el Consejo Estatal del Azúcar, vendió o cedió en arrendamiento los mismos terrenos dos veces, es decir al grupo Catelar que representa Campollo-Vicini y a la Azucarera Porvenir que representan los españoles.
“El verdadero culpable de esta tragedia es el Director del Consejo Estatal del Azúcar (CEA), que está repartiendo y regalando la tierra del Estado a los grupos económicos, mientras que a los verdaderos agricultores, lo está sacando por la fuerza para vender alegremente el patrimonio del pueblo a los grupos económicos" sostuvo.
Es el enfrentamiento número cinco que se produce en las últimas 72 horas en la zona, acusándose al CEA de provocar el conflicto que puede degenerar en más muertes.
Los inversionistas pelean por las colinias de Cañas Haití Mejía y Hacienda Margarita, que implica unas 105 mil tareas, según José Guzmán de los Derechos Humanos, que llamó al presidente Leonel Fernández a intervenir para evitar un holocausto humano, motivado por los intereses, donde dijo el Director del CEA es el principal protagonista.