Por / Manuel Ant. Vegaatacando10@hotmail.comHato Mayor.- Un hecho insólito ha tenido lugar en el empobrecido sector Villa Vilorio, al norte del municipio de Hato Mayor del Rey, ya que un perrito nació con patas, ombligo y ano parecido a los de un ser humano.
El perrito, que tiene como mote Deibi es de color negro azabache y tiene la facultad de pararse y caminar hacia atrás, como los humanos.
Tampoco nació con testiculo y orina por el" obligo", que hace la vez de pene.
El raro caso se presentó en la casa de doña Lourdes María Peguero, que dice creer que la madre de Deibi, como puso de nombre al perrito, fue usada por un hombre, que habría engendrando la criatura.
Lourdes, que dijo adoptó el perrito con deformidad en su cuerpo, observó el extraño fenómeno en las extremidades de Deibi, a casi tres meses de nacido. Deibi, como todo los miembros de la familia Peguero llaman al perrito, se ha robado el cariño de los habitantes del barrio, que ahora lo cuidan con especial esmero y lo han bautizado como “Perro Humano”, por tener las patas, el ombligo y ano como lo de un ser humano y ser diferente a los demás.
El perrito de la historia es el único que sobrevive de tres que parió su viralata madre, que no ha tenido más parto.
Deibi tiene la particularidad de caminar con sus patas acostadas en la tierra y de caminar para atrás como los humanos, sin ningún miramiento.El afortunado perro es ahora visitado por decenas de personas, que van a la casa de Lourdes María Peguero, movida por la curiosidad.
Para Lourdes, propietaria adoptiva del canino, el fenómeno “es una llamada de atención por parte de Dios, para que el hombre entienda sobre la tierra que el final del mundo está cerca”.
Deibi hace una vida normal en el patio de su ama e ingiere los alimentos que cocinan en el hogar, exceptuando los huesos, que los rechazas en cuanto lo ve.
Ambiorix Marte, médico veterinario consultado, explicó que lo del perro es una malformación congénita, que pudo desarrollarse por la forma en que la madre dormía durante la gestación.
Las pantorrillas de las patas también se asemejan al pie humano.En Hato Mayor pasan muchas cosas raras....
Lourdes, que dijo adoptó el perrito con deformidad en su cuerpo, observó el extraño fenómeno en las extremidades de Deibi, a casi tres meses de nacido.
Deibi tiene la particularidad de caminar con sus patas acostadas en la tierra y de caminar para atrás como los humanos, sin ningún miramiento.
Para Lourdes, propietaria adoptiva del canino, el fenómeno “es una llamada de atención por parte de Dios, para que el hombre entienda sobre la tierra que el final del mundo está cerca”.
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